Una mirada a ESO

Se suele afirmar que la Astronomía es la ciencia más antigua, y no cabe duda de que una mirada hacia la banda estrellada de la majestuosa Vía Láctea, vista en todo su esplendor en una noche clara, debe haber impresionado a personas de todas las edades y culturas. Hoy en día, la astronomía destaca como una de las ciencias más dinámicas y modernas, ya que utiliza algunas de las tecnologías más avanzadas y sofisticadas. Son tiempos apasionantes para la astronomía, pues la tecnología permite estudiar objetos que se hallan en los lejanos confines del Universo y detectar planetas en torno a otras estrellas. Podemos empezar a responder una pregunta fundamental que nos fascina a todos y cada uno de nosotros: ¿estamos solos en el Universo?

El Observatorio Europeo Austral es la organización intergubernamental de ciencia y tecnología de mayor importancia en astronomía. Lleva a cabo un ambicioso programa orientado al diseño, construcción y operación de potentes instalaciones de observación astronómica instaladas en tierra, proporcionando así las herramientas necesarias con el fin de que la astronomía logre importantes descubrimientos científicos. ESO también cumple un importante papel tanto en la difusión como en la organización de la cooperación en investigación científica.

ESO opera en tres sitios, únicos por su calidad para la observación, ubicados en el Desierto de Atacama chileno: La Silla, Paranal y Chajnantor. El primer observatorio de ESO está en La Silla, a 2.400 metros de altitud y a 600 kilómetros al norte de Santiago de Chile. Está equipado con varios telescopios ópticos con espejos de hasta 3,6 metros de diámetro. El NTT (New Technology Telescope), de 3,5 metros, estableció nuevos parámetros para la ingeniería y el diseño de telescopios y fue el primero en el mundo en tener un espejo primario controlado por ordenador, una tecnología desarrollada en ESO y aplicada ahora en la mayoría de los grandes telescopios del mundo. El Telescopio de 3,6 metros de ESO alberga actualmente al buscador de planetas extrasolares más importante del mundo: HARPS (High Accuracy Radial velocity Planet Searcher o Buscador de Planetas con Velocidad Radial de Alta Precisión), un espectrógrafo con una precisión inigualable.

Mientras La Silla permanece a la vanguardia de la astronomía (sigue siendo el segundo observatorio astronómico basado en tierra científicamente más productivo) el observatorio de Paranal, a 2.600 metros de altura, alberga al Very Large Telescope (Telescopio Muy Grande, VLT), el telescopio más destacado de la astronomía europea. Paranal está situado unos 130 kilómetros al sur de Antofagasta en Chile, 12 kilómetros hacia el interior desde la costa del Pacífico, en una de las áreas más secas del mundo. Las operaciones científicas en Paranal comenzaron en 1999 y han dado como resultado varios programas de investigación extremadamente exitosos.

El VLT es un telescopio novedoso, basado en las últimas tecnologías de vanguardia. Se trata de un conjunto de cuatro "Telescopios Unitarios", cada uno con un espejo primario de 8,2 metros de diámetro. Con un "Telescopio Unitario" de estas características se han obtenido, en una hora de exposición, imágenes de objetos celestes apenas visibles de una magnitud de 30. Esto equivale a observar objetos que son cuatro mil millones de veces más débiles que aquellos que se ven a simple vista.

El VLT también cuenta, de manera adicional, con cuatro "Telescopios Auxiliares" móviles de 1,8 metros de diámetro. Una de las características más interesantes del VLT es la opción de usarlo como un interferómetro óptico gigante (VLT Interferometer, Interferómetro VLT o VLTI). Esto se realiza combinando la luz desde uno o varios de los Telescopios Unitarios, incluyendo uno o más de los cuatro Telescopios Auxiliares móviles de 1,8 metros. En este modo interferométrico, el telescopio posee una visión equivalente a la de un único telescopio del tamaño de la distancia que separa los espejos más alejados. En el caso del VLTI, utilizando los Telescopios Auxiliares, esta distancia puede ser de más de 200 metros.

Cada año, se presentan alrededor de 2.000 propuestas de investigación para utilizar los telescopios de ESO, solicitando de cuatro a seis veces más noches de las que están realmente disponibles. ESO es el observatorio astronómico más productivo del mundo, y cada año se obtienen como resultado numerosas publicaciones: sólo en el 2013 se publicaron más de 840 artículos en revistas científicas especializadas, basados en la información de ESO. Además, la mayor parte de los artículos de investigación basados en datos del VLT se citan el doble de lo habitual. La gran eficiencia de las "máquinas científicas" de ESO genera actualmente una gran cantidad de datos a un ritmo muy alto. Los datos se almacenan en la Sede Central de ESO, en instalaciones permanentes destinadas al archivo de datos científicos (Science Archive Facility). En estos momentos el archivo contiene más de 1,5 millones de imágenes o espectros con un volumen total de unos 65 terabytes (65.000.000.000.000 bytes) de datos. Esto equivale al contenido de unos 30 millones de libros de 1.000 páginas cada uno; ¡ocuparían más de 1.000 kilómetros de estanterías!

El Gran Conjunto Milimétrico/Submilimétrico de Atacama (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array, ALMA), actualmente el proyecto astronómico terrestre más grande que existe, es una instalación revolucionaria para la astronomía mundial. ALMA está compuesta por un conjunto de 66 antenas gigantes de 12 y 7 metros de diámetro que observan a longitudes de onda milimétricas y submilimétricas. ALMA inició las observaciones científicas en el año 2011 y se inauguró en el 2013. ALMA está ubicado en el Llano de Chajnantor, a 5.000 metros de altura, por tanto es uno de los observatorios astronómicos más altos del mundo. El conjunto ALMA es una colaboración entre ESO (en representación de los estados miembros), la Fundación Nacional para la Ciencia de EE.UU. (NSF, National Science Foundation) y los Institutos Nacionales de Ciencias Naturales de Japón (NINS, National Institutes of Natural Sciences), junto con el Consejo Nacional de Investigación de Canadá (NRC, National Research Council), el Consejo Nacional de Ciencias de Taiwán (NSC, National Science Council) y el Instituto Academia Sinica de Astronomía y Astrofísica de Taiwán (ASIAA, Academia Sinica Institute of Astronomy and Astrophysics), y el Instituto de Astronomía y Ciencias Espaciales de Corea (KASI, Korea Astronomy and Space Science Institute) en cooperación con la República de Chile. El Observatorio Conjunto ALMA (Joint ALMA Observatory, JAO) está gestionado por ESO, AUI/NRAO y NAOJ.

El próximo paso, más allá del VLT, es construir el Extremely Large Telescope (Telescopio Extremadamente Grande, ELT), un telescopio con un espejo primario de 39 metros. El ELT será "el mayor ojo del mundo para observar el cielo": el mayor telescopio del mundo que trabajará en los rangos óptico e infrarrojo cercano. El ELT afrontará varias de las más apremiantes preguntas de la astronomía aún sin resolver. Posiblemente podría revolucionar nuestra percepción del Universo, tal y como hizo el telescopio de Galileo hace 400 años. A finales del año 2014 se dio luz verde a su construcción, con el objetivo de comenzar las operaciones en el año 2024.

En la Sede Central de ESO (que incluye el centro científico, técnico y administrativo de la organización) ubicada en Garching, cerca de Múnich (Alemania), se llevan a cabo programas de desarrollo técnico para proporcionar a los observatorios la instrumentación científica más avanzada.